La probable quiebra del grupo inmobiliario China Evergrande, un coloso empresarial con una deuda de más de 300.000 millones de dólares asusta a los mercados. Si se produce puede tener implicaciones sistémicas en el mercado inmobiliario de chino. Hay un enorme potencial de convertirse en un desastre financiero y económico que recuerda al de Lehman Brothers.
Evergrande, siendo el segundo grupo inmobiliario del país, supone el 2% del PIB de China. Su caída causaría millones de víctimas: trabajadores, propietarios de vivienda sin finalizar, proveedores e incluso bancos. Pero lo que se teme no es solo la caída del gigante, sino el efecto dominó que podría tener sobre el sector inmobiliario chino, que representa entre el 20% y el 30% del PIB nacional.
Pasivo de Evergrande y mercado de bonos
La empresa, más sus subsidiarias, se calcula que emplean a más de 4 millones de personas (200.000 trabajadores directos). En caso de default, los pasivos de Evergrande afectarían a más de 128 bancos y 120 instituciones.
En el mercado de bonos, Evergrande representa el 4% de la alta rentabilidad inmobiliaria china. Cualquier impago tendrá también impacto en el mercado de crédito de alto rendimiento. El desplome en el mercado de bonos podría ser inmediato. 19.000 millones de dólares de su deuda está en bonos offshore, por lo que su quiebra también impactaría fuera del mercado chino, aunque en mucha menor medida.
La empresa tiene unos 700 proyectos en marcha, de los que la mitad se encuentran parados por sus problemas financieros.
Para obtener liquidez está intentando vender activos, pero la situación es complicada con un mercado que se está ralentizando, con proyectos que no se están entregando y la imagen de poca solidez como empresa, que retrae a posibles compradores inmobiliarios.
Gobierno chino ante la quiebra de Evergrande
El gobierno de Pekín sigue de reojo la evolución de la empresa, mientras se especula si es «demasiado grande para quebrar». El consenso de los inversores chinos piensan que acabará rescatándola. Simplemente parece que están esperando el momento adecuado para intervenir. Mientras la empresa ya pierde el 80% de su valor en bolsa en 2021.
Dejar caer a Evergrande tendría un impacto aproximado de 350.000 millones de dólares para el PIB chino. El gobierno central es consciente del problema. No está dispuesto a correr riesgos y decidirá (si no lo ha hecho ya) cuando atajarlo. Lo único que falta por saber, es cuando lo va a comunicar.
Nadie es Evergrande para caer….